miércoles, 15/04/15 – 14:58
Alrededor de un tercio de las víctimas de trata de personas en el mundo es menor de edad, dos de cada tres víctimas infantiles son niñas, y éstas, junto con las mujeres, constituyen el 70% del total de la población sometida a esta forma de esclavitud contemporánea.
Estos son los últimos datos disponibles por la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (Unodc, en sus siglas en inglés), de los que se ha hecho eco Save the Children con motivo del Día Internacional contra la Esclavitud Infantil, que se celebra este jueves, 16 de abril.
La mayoría de las víctimas de trata lo son con fines de explotación sexual, pero cada vez se detectan con más frecuencia otras formas, como el trabajo forzoso, la trata de niños para la lucha armada, la comisión de delitos o la mendicidad forzada.
La directora de Sensibilización y Políticas de Infancia de Save the Children, Ana Sastre, indicó que el porcentaje de niños víctimas de trata “no ha hecho más que crecer” desde que la Unodc comenzó a recopilar datos en 2004 y hasta 2011 (último año del que se tienen datos), periodo en que el porcentaje de niñas sometidas a estas prácticas ha pasado del 10 al 21%.
“Tememos que desde 2011, cuando las necesidades socioeconómicas se han disparado en muchos contextos, la situación se haya agravado y el número de niñas víctimas se pueda haber duplicado”, aventuró Sastre.
En Europa, entre 2010 y 2012 se registraron más de 30.000 víctimas de trata, de las que un 17% tenían de 12 a 17 años y un 2% menos de 11 años. La mayoría (el 69%) lo eran con fines de explotación sexual, un 19% para la explotación laboral y un 12% para otras formas de explotación, como el tráfico de órganos, las actividades delictivas o la venta de niños.
TRATA DE MENORES EN ESPAÑA
En España se calcula que hay entre 40.000 y 50.000 mujeres y menores de edad víctimas de trata, pero en 2012, último año del que se tienen datos oficiales, tan sólo se identificaron seis niñas, lo que, según Save the Children, “no refleja la magnitud real del problema”, porque “España es un país de tránsito y de destino de niños y especialmente niñas tratadas con fines de explotación sexual”.
“Niños y niñas de corta edad llegan a territorio español acompañados por adultos que dicen ser sus padres. Sin embargo, los esfuerzos que se realizan no son suficientes para comprobar el parentesco. La situación es especialmente delicada en aquellas zonas por las que acceden de manera irregular adultos acompañados de niños, como es el caso de Andalucía y de las ciudades de Ceuta y Melilla. Cada vez que llegue a España un niño en situación irregular, debe valorarse la situación de riesgo, investigarse adecuadamente y adoptarse medidas de protección eficaces”, añadió Sastre.
Save the Children reclamó a las administraciones públicas españolas que creen recursos especializados para alojamiento y atención a las víctimas de trata que son menores de edad, cuentan con menores dependientes a su cargo o tienen alguna discapacidad; elaboren un protocolo de actuación específico si las entidades competentes detectan indicios de trata en menores y establezcan procedimientos especiales sobre menores no acompañados víctimas de trata.
Por último, Save the Children instó a todas las fuerzas políticas a que adopten un compromiso político que lleve a la aprobación de una estrategia integral frente a todas las formas de violencia contra la infancia, la cual, según Sastre, «debe contar con un presupuesto específico y tener como eje vertebrador una ley orgánica que establezca medidas de prevención, detección, protección y mecanismos de denuncia y reparación del daño».