APDHA reclama vías seguras tras triplicarse las entradas por mar el pasado año

  • Cerca de 250 personas perdieron la vida intentando llegar a España
  • Las llegadas a Cádiz han experimentado un incremento de más del 300%
  • Durante 2017, España ha sido condenada por el Tribunal Europeo de Derechos Humanos por las devoluciones en caliente

La Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía ha pedido hoy vías seguras para acceder a España que impidan que las personas tengan que arriesgar su vida en el mar. Lo ha hecho con motivo de la presentación de su Balance Migratorio 2017 en el que se evidencia un incremento notable de las entradas por vía marítima España, que con 22.419 personas casi se triplica respecto del año anterior.

El balance constata un aumento en la llegada de personas procedentes de otros países a España que en el último año ha llegado a duplicarse -28.587 personas en total sumando vías marítimas y terrestres-. Este incremento se produce al tiempo de un descenso muy significativo del resto de rutas hacia Europa. El aumento de la represión, la persecución de las ONG y la situación infernal en Libia dan cuenta de ese descenso de migrantes en el Mediterrneo Central, que han buscado vías alternativas en el entorno del Estrecho. A pesar de ello las entradas por el Mediterráneo Central quintuplican todavía las de las llegadas por la Frontera Sur de España.

“Las medidas de contención de los flujos concertadas con los países de origen, la represión ejercida contra los migrantes y los mecanismos de cierre de fronteras de la Europa Fortaleza no son capaces de frenar los movimientos de personas que en ocasiones llevan años sorteando países para alcanzar un lugar mejor donde vivir”, asegura la APDHA.

Para la organización, el incremento de llegada de inmigrantes a las costas españolas ha puesto de manifiesto de nuevo, como ocurrió en 2006, que no existen estructuras ni medios adecuados para tender dignamente a las personas llegadas tras un largo calvario y para que se respecten sus derechos. Ello ha quedado en evidencia en puntos como Málaga, Barbate o Motril.

“La realidad es insoportable”, advierten, 249 personas han perdido la vida en 2017 intentando alcanzar a España, entre ellos Samuel, el niño de 4 años cuyo cuerpo apareció en enero en las costas de Barbate y el de su madre, Véronique Nzazi descubierto en febrero en Argelia. La asociación recuerda que en los últimos 20 años, más de 6.000 personas han fallecido intentando alcanzar España por la Frontera Sur. Estos son solo datos que ha logrado contrastar la APDHA ya que, según la Organización Internacional de las Migraciones (OIM), por cada persona que se ha comprobado que falleció, de otras dos no se supo nunca nada, lo que llevaría a triplicar esta “cifra ya horrible”.

El empobrecimiento extremo, la presencia de conflictos armados o la ausencia de futuro empujan a los sectores más jóvenes a la emigración como única alternativa viable. Las políticas migratorias intentan paralizar estos flujos, aunque sea provocando graves violaciones de los derechos humanos, denuncia la organización, que recuerda que, durante 2017, España ha sido condenada por el Tribunal Europeo de Derechos Humanos por practicar de manera sistemática devoluciones en caliente en la frontera, evitando la opción a solicitar el derecho de asilo.

Otra de las conclusiones del balance es la significativa llegada de personas a Andalucía en general y a las costas de Cádiz en particular. Esta última, con 6.289 personas, registra un incremento de más de un 300% respecto al año pasado. Marruecos es el principal país de origen de quienes llegan a España, en lo que sin duda “habrá influido la situación de crisis que vive este país desde hace más de un año”, opina la asociación. Le sigue Argelia, Guinea, Costa de Marfil, Gambia y Siria, según datos de la OIM. Por zonas geográficas, en conjunto sigue siendo mayoritaria la llegada de personas de origen subsahariano.

 

Las cifras muestran un descenso en el número de mujeres que han migrado hacia España en el último año -relacionado probablemente con el importante incremento de migración procedente del Magreb-. Además, destaca un aumento de menores en más de un 66%, lo que ha evidenciado este año la falta de adecuación de recursos para la protección de los niños y niñas que llegan a nuestro país.

Entre los métodos utilizados en los accesos por vía marítima es destacable este año la recuperación de las antiguas pateras de maderatanto en el Estrecho como en el mar de Alborán y el incremento de motos de agua especialmente en Ceuta. Continúan el uso de embarcaciones de juguete tipo toy e incluso la de tablas de surf, sobre todo por menores, haciendo cada vez más peligrosa la travesía. El empleo de estos métodos pone en serio riesgo la vida de las personas que no tienen opciones reales de viajar de manera segura por las restricciones de las políticas migratorias.

La respuesta ilegal e insolidaria que desde España se está dando a los movimientos de población debe cambiar, plantea la organización. “Concertinas, alambradas, patrulleras, devoluciones, muerte y sufrimiento no pueden seguir siendo la respuesta de este país a las personas que huyen de la guerra o el hambre, la historia nos juzgará por la crueldad e inhumanidad que ejercen nuestros gobernantes y de la que son testigo nuestras fronteras”, explica la asociación que reclama políticas acogedoras que pongan por delante la dignidad y los derechos humanos de las personas.

#BalanceMigratorio17

https://www.apdha.org/balancemigratorio17/

El triple de inmigrantes en patera por la frontera sur

15196708948030

El número de inmigrantes llegados por mar a España se ha triplicado hasta las 22.419, según el balance de Pro Derechos Humanos de Andalucía

El año pasado murieron 249 personas cuando trataban de llegar al país y ya son más de 6.000 los fallecidos en los últimos 20 años

Las costas españolas fueron en 2017, más que nunca, la puerta de atrás de Europa para la inmigración irregular. Mientras las otras rutas hacia el continente europeo experimentaban un descenso, la entrada irregular de personas por la frontera sur a través de pateras se triplicó con respeto a 2016.

En apenas doce meses, según los datos recogidos y hechos públicos ayer por la Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía, fueron 22.149 los extranjeros que arribaron a las costas españolas -fundamentalmente las andaluzas- en algún tipo de embarcación, una cifra que multiplica por tres la registrada el año anterior y que demuestra, advirtió ayer el coordinador del Área de Solidaridad de la ONG, Rafael Lara, que la española se ha convertido en la gran ruta alternativa ante el «aumento de la represión, la persecución de las ONG y la situación infernal que se da en Libia». Aunque, a pesar de todo, especificó, las entradas por el Mediterráneo central aún quintuplican a las de la frontera sur española.

No sólo creció de forma exponencial el número de extranjeros llegados a España por la costa. También se disparó el año pasado la cifra de pateras en las que viajaron, principalmente, desde Marruecos. Frente a las 475 embarcaciones que se contabilizaron en 2016, el año pasado la cifra alcanzó las 1.199, más del doble.

En total, los llegados a España, tanto por mar como por tierra, en los doce meses de 2017 fueron 28.857 personas, un dato espectacular si se tiene en cuenta que un año antes fueron únicamente 14.128 los extranjeros que entraron en territorio nacional por vía marítima y terrestre. España se coloca de este modo en tercer lugar en Europa en lo que se refiere a recepción de inmigrantes, sólo superado por Italia -que recibió 119.369 extranjeros- y Grecia -con 35.052 inmigrantes-.

Claro que el dato es aún más llamativo si se compara con el número de extranjeros que entraron en el país en 2010. En apenas ocho años, casi se ha multiplicado por seis esta cifra puesto que en 2010 se registraron 5.369 entradas irregulares de extranjeros. En todos estos años, la tendencia ha sido siempre al alza con la única excepción de 2016, cuando se experimentó un ligero descenso.

 

Andalucía fue, con diferencia y siempre según los datos de Pro Derechos Humanos de Andalucía, la principal puerta de entrada a la Península. De los 28.587 inmigrantes que llegaron a España en 2017 lo hicieron a través de la comunidad andaluza 18.090. A través de Melilla entraron 4.831; por Ceuta, 2.438; por Levante, 2.492; por Canarias, 302 y por Baleares, 302.

http://www.elmundo.es/andalucia/2018/02/26/5a93f955268e3e0c468b4688.html

José Luis Pinilla: «Acoger, proteger, promover e integrar a los emigrantes y refugiados»

campana-acogida_560x280

«ACOGER ES BESAR A HELENA MALENO, QUE TANTAS VIDAS HA SALVADO EN EL ESTRECHO»

«Promover es subir sobre los hombros al emigrante vulnerable y proteger es abrazar»

(José Luis Pinilla sj).- La presentación del mensaje del papa y las acciones subsiguientes para la Jornada de migraciones están ofrecidas desde una visión dinámica de cuatro verbos inspiradores del soñador Papa Francisco: «Acoger, proteger, promover e integrar a los emigrantes y refugiados»

Me atrevo a sugerir una presentación icónica de los mismos. Son importantes los sueños. Porque quien no los tiene «que se disponga a tener dueños» que diría Luis Eduardo Aute . Al mensaje del papa y sus sueños quiero colaborar añadiendo unas imágenes

Acoger es besar. Lo vi el otro día, paseando por Tetuán un barrio con mucha migración. Una pareja, él claramente europeo y ella africana se estaban dando un beso de enamorados . Al chaval lo conocía. Trabaja de voluntario en una casa de acogida y sé de su sensibilidad para tener detalles con las personas que llegan por primera vez a la casa de acogida… Les va explicando suavemente las normas de funcionamiento de la casa, horarios, comportamientos sociales…

Hoy todo eso de la acogida lo expresaba con un beso a una persona que seguramente entendió el mensaje a la primera: «este hombre, esta tierra, me quieren. Me acogen. Quieren rozar su piel con la mia…»

Los obispos españoles cuando hablan del tema incluyen que es necesario también en la acogida «ofrecer la Palabra de Dios porque es lo mejor que podemos ofrecerles». Es verdad. pregunto ¿ la palabra de Dios no es el beso del Padre a la humanidad sobre todo a los que nadie besa?

Proteger es abrazar. Cuando una persona tiembla -por ejemplo- de miedo ; cuando una persona necesita calor porque siente el frío del campo de refugiados tan fuerte como el hielo de la pena, cuando un emigrante es zarandeado y golpeado porque le faltan papeles y apenas puede explicar la razón de no tenerlos ( huir de un país violento, huir del hambre, huir de la violación permanente a la que se ve sometido en su viaje de tránsito, huir de sus tierras ahora desérticas por la depredación humana cuando antes eran tierras como vergeles…) cuando un emigrante ( muchas veces los vemos protegidos por una mata) pasa por esos trances, proteger es abrazarle.

Darle la inmensa ternura del Dios de la vida, sobre todo cuando lo hacemos – ¡deberíamos hacerlo siempre ¡- a los menores emigrantes víctimas de la trata – como también recuerdan los obispos. Como acción necesaria, cuando la ternura de Dios se abraza la humanidad doliente concretada en los que huyen y no encuentran abrazos…, acogerlo, estrecharlo y estrujarlo en el abrazo humano que da calor; eso es proteger…

Promover es subir sobre los hombros al emigrante vulnerable

A veces los migrantes en la búsqueda de nuevos proyectos vitales necesitan perspectiva de amplias miras que a pie de tierra apenas se perciben. Porque desde el suelo solo se siente el sufrimiento, el barro, el dolor por una rápida huida tropezándose mil veces, la dureza del pavimento como colchón de los sueños, o la dureza de uno hierros de la hélice de un barco o camión en el que esconderse para entrar a otras fronteras….

Desde el suelo a veces solo se ven prejuicios y desprecios. Estereotipos socializados incluso entre los católicos hacia los emigrantes Por eso promover es subir samaritanamente al emigrante y al refugiado sobre mis hombros para que siga comprobando que hay otros horizontes en la vida da cada uno. Promover es subir sobre mis hombros al arrumbado de los caminos de las historias a donde arrojamos a tantos (Trump dixit: «¿Por qué recibimos a gente de países de mierda?» refiriéndose a gente de El Salvador, Haití y países africanos?)

Proteger es subir sobre mis hombros para que el cielo al que tienen derecho – como tú y como yo- casi lo puedan tocar con las manos. Mejor unidos junto a los hombros de muchos formando algo así como los hermosos y altos «castellers» catalanes, donde un grupo de gente se agrupa y se sostiene solidariamente para trepar a los hombros de cada uno y así formar torres elevadas o más rematadas por un chaval que desde allí ve más, alto y más lejos .

Promover enredados, como quieren los obispos españoles al ofrecer «todos nuestros recursos y capacidades para la reflexión y la acción desde nuestro rico y eficaz trabajo en Red con las instituciones eclesiales como Cáritas, Confer, CEM, Justicia y Paz y otras obras apostólicas dedicadas a la promoción de los inmigrantes.»

Integrar es coger de la mano

MACEDONIA-GREECE-EUROPE-MIGRANTS

Cualquier observador de la vida que despegue unos momentos su vista del móvil o de su ombligo y descubra a Dios en la vida diaria, podrá comprobar infinidad de veces a pequeños de distintas razas dándose la mano, yendo al colegio, en los juegos, etc. Integrar es que la mano pequeña se sienta fortalecida por el contacto de la mano grande que sostiene y ambas se alimenten del calor, la suavidad y la fuerza.

Me lo he preguntado muchas veces: Cuando un padre lleva de la mano a su hijo pequeño. ¿Quién conduce a quién? Integrar es saber que lo que tú haces se complementa con los que mis manos construyen (o viceversa). Integrar es coger de la mano y mirar en la misma dirección. Ni la tuya ni la mía, la que vemos conjuntamente enriquecidos por la originalidad de cada uno. Recordad lo de Machado:» ¿Tú verdad? no, la verdad; y ven conmigo a buscarla. La tuya guárdatela.»
Hoy propongo para terminar estos ejemplos:

Acoger es besar a Helena Maleno, la persona que más vidas ha salvado en el estrecho criminalizada por ejercer la hospitalidad

Proteger es abrazar: Como lo ha hecho Gabriel Delgado con mucha gente promoviendo en la playa de Barbate el recuerdo del pequeño Samuel cuyo cadáver apareció hace un año en una playa cercana y provocó un gran abrazo orante de muchas personas

Promover es subir sobre los hombros al emigrante vulnerable que es lo que hace José Palazón luchando diariamente para que los niños de Melilla se suban sobre sus hombros, y jueguen con él, y tengan escolarización y no precisamente en la calle como ahora sucede y por cuyas acciones parecidas también está siendo criminalizado

Integrar es coger de la mano a Ahmed Bouderbala acompañándole cuando viajó desde París para interesarse y aclarar las causas de que su hermano Mohamed Bouderbala se suicidara en la cárcel de Archidona en Málaga. O sentir la mano del niño que se te ha escurrido y ahogado en el mar al intentar salvarlo y quedarse solo con su flotador infantil. Como le sucedió a Oscar Campos. Y así la suavidad infantil de la mano de ese niño pegada al salvavidas (el amor no se corrompe) llegó al papa en el regalo del salvavidas vacío que Oscar de Pro activa Arms le hizo

Y a quien les queden cortas estas imágenes y pidan – están en su derecho – concreciones de incidencia social para estas propuestas que lea los mensajes del papa y los obispos españoles a propósito de la Jornada Mundial del emigrante y refugiado. Ahí hay muchas Unas realizándose, otras no y otras casi. Porque aquí no se habla de sexo de los ángeles sino de acciones concretas- incidencia necesaria y no solo palabras- que se formulan en 20 puntos para los pactos globales (septiembre 2018) en la ONU.

José Manuel Vidal, 14 de enero de 2018

 

Decenas de personas claman en Barcelona contra el CIE de Algeciras: «Ni nuevos, ni renovados»

Decenas-personas-clamado-CIE-Barcelona_EDIIMA20171130_0955_4

Decenas de personas claman en Barcelona contra el CIE de Algeciras: «Ni nuevos, ni renovados»

«Es indignante que se presente un CIE como si fuese un resort«, explica con furia Mercè Duch, portavoz de Tanquem els CIE. Ella, junto a decenas de personas más, se han manifestado frente a la Delegación del Gobierno en Barcelona para mostrar su repulsa hacia el nuevo CIE en Algeciras, anunciado por el ministro de Interior Juan Ignacio Zoido esta misma semana.

El ministro dio a conocer el nuevo centro con un  escueto mensaje en sus redes sociales: «Así será el nuevo CIE de Algeciras, primer ejemplo del nuevo modelo de estos centros». El comunicado no gustó a las entidades que luchan por el cierre de los CIE, que no creen en «nuevos modelos» para los centros. «Dentro se vulneran los derechos humanos y la libertad de movimiento de las personas», zanja Duch.

«Es vergonzoso este anuncio después de dar a conocer que hay una prisión que se usa como CIE», añade la activista en referencia a las más de 500 personas migrantes que hay en la cárcel de Archidona. Es por ello que valoran el anuncio de este nuevo centro como una «campaña de lavado de imagen» de los CIE.

La concentración en Barcelona, al grito de «ni nuevos, ni renovados, CIE cerrados», tiene lugar al mismo tiempo que en otras ciudades como Madrid, pues ha sido organizada en el marco de una campaña estatal por el cierre de los CIE y por el fin de las deportaciones. En un comunicado conjunto, dicha campaña señala que el Ministerio del Interior «intenta esconder sin éxito la actual regresión en materia de derechos humanos en los CIE».

Otras ‘mejoras’ en los CIE

Los activistas recuerdan que no es la primera vez que Interior promete mejoras en los centros para después no cumplir con ellas. Tanquem els CIE recuerda que en 1988, cuando se inauguró el CIE de Moratalaz (Madrid), el espacio era un «sótano sin ventilación», y que posteriormente el propio director fue imputado por torturas. Pese a ello, el centro fue descrito como «un hotelito» por parte de los policías que allí trabajaban.

En la misma línea, la entidad rememora la inauguración del CIE de Aluche (también  en Madrid), que ganó un premio de arquitectura pero donde, según explican, no se habilitaron baños en las habitaciones hasta que las quejas de los internos y diversas organizaciones sociales dieron lugar a autos judiciales de los Jueces de Control.

Los centros de internamiento de extranjeros son dependencias no penitenciarias donde se priva de libertad durante un máximo de 60 días a migrantes por el hecho de encontrarse en situación irregular, con el objetivo de proceder a su expulsión. Además del CIE de Algeciras, está prevista la construcción de dos centros más, uno en Madrid y otro en Málaga. La manifestación en Barcelona también ha servidor para recordar las  muertes de Samba Martine en el CIE de Aluche y de Idrissa Diallo en el CIE de la Zona Franca de Barcelona, ambas en diciembre de 2011.