A la Oranienplatz del barrio berlinés de Kreuzberg acaba de llegar una marcha de refugiados. Durante un mes ha recorrido Alemania a pie, desde Würzburg hasta Berlín, 600 kilómetros, para protestar por las condiciones a las que están sometidos. Jóvenes solidarios locales y refugiados levantan tiendas de campaña. Se cocina comida caliente. Los emigrantes y refugiados son los héroes anónimos de la Europa actual, gente que lleva en su biografía historias increíbles. Su marcha de protesta en Alemania es ilegal y no tiene precedentes.
Con 18 años Bashirollaj Safi se fue de Afganistán a Grecia. Le acompañaba su hermano de 9 años. “La vida en Grecia se ha hecho imposible”, explica. Los emigrantes no se atreven a salir de casa por temor a ser atacados por fascistas y policías que trabajan al unísono, dice. Un día, un grupo persiguió por la calle a su hermano que volvía de la escuela, le tumbó le rompió un brazo. “Yo fui golpeado varias veces, un amigo fue arrollado por una moto y mientras estaba en el suelo otra volvió a pasar por encima. Murió dos horas después”.
[Fuente: La Vanguardia. Leer más]
DATOS: En Alemania hay unos 130.000 solicitantes de asilo, de los que unos 40.000 están forzados a vivir en campos. En relación a su población, Alemania ocupa una posición intermedia por el número de refugiados que acoge. Catorce países europeos tienen más refugiados. Cada año centenares de hombres, mujeres y niños mueren intentando alcanzar territorio europeo.