El Gobierno modificará la ley de extranjería para evitar que los ciudadanos extranjeros obtengan la tarjeta sanitaria solo por el hecho de empadronarse en España, de tal forma que se establecerán una serie de requisitos, como tener residencia fiscal (vivir sesis meses y un día) y pagar impuestos en España, para tener derecho al sistema nacional de salud. Es una de las medidas de la reforma sanitaria que ha aprobado este viernes el Consejo de Ministros a través de un Real Decreto.